Hoy día 8M quiero hacer una mención especial a mi Madre como mujer trabajadora, con 6 varones en casa, mis 4 hermanos y mi padre, que lo ha dado todo por nosotros y nunca nos ha faltado de nada, y ojalá que siga así. Nos ha educado, nos ha dado lecciones de vida, sobre todo a mí, y me sorprende la capacidad que tiene todavía para trabajar, enfrentarse a todo tipo de problemas de trabajo, a que le caigan chaparrones, y ahí sigue, al pie del cañón. Sin embargo yo a la primera de cambio soy de abandonarlo todo y tirarlo por la borda.
La buena educación que nos ha dado tanto en casa como fuera, y como ella suele decir, a veces la educación se aprecia en la mesa, y tiene bastante razón, porque yo cada vez que veo a alguien comer mal pienso en la educación que nos ha aportado mi madre.
Quiero darle las gracias de todo corazón porque en mis peores momentos siempre ha estado ahí, tanto en los mios como en los de mis hermanos. Cuando he estado ingresado siempre que ha podido ha ido a verme. Me ha enseñado a decir perdón cuando hay que decirlo, a ver la vida de otra manera, porque no todo es de capa caída, todo tiene sus lados buenos y malos y hay que mirar lo positivo. Como suele decir cuando no puedo más, hay que saber decir que no, y la frase que siempre recordaré de mi madre: “es de buen nacido ser agradecido”.
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