Día 20 de julio, aniversario de boda de mis padres, mientras escucho música de James Taylor del álbum American Standard. Mi madre siempre cuenta cómo le gustaba mi padre y que haciendo fotos en la playa de Bakio, mi padre, como es lógico cámara en mano, le hizo una foto que a mi abuelo Alberto siempre le gustó mucho. De hecho tenían una copia en su casa que al final terminó en la nuestra porque a mí abuela no le gustaban los favoritismos.
Aquí estoy, escribiendo a las 0:00 am de la noche como si de un niño se tratara, ya que mañana viene mi hermano Borja a casa a comer y es su cumpleaños. El mío es el miércoles de la semana que viene, qué queréis que os diga, soy un pesetero y un materialista, me encantan los regalos, es parecido a lo de la comunión. Eso a todo el mundo no le pasa, cada uno piensa como piensa y la gente está para respetarla. Voy a ser sincero, a mí la comunión me importaba un pepino. Yo lo que quería eran los regalos y no tengo miedo a ocultarlo. Hay quien cree que la religión es muy importante en la vida, respeto su opinión. Cada uno cree en lo que cree y piensa como piensa, es como si a uno le gusta más el monte que la playa. Y como se suele decir, para gustos los colores.
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